miércoles, 18 de enero de 2012

CULTIVO DE ORQUIDEAS

En dos páginas vamos a ver cada uno de los aspectos que afectan al cultivo de Orquídeas. En las fichas que irán apareciendo de cada especie se concretarán las exigencias y cuidados particulares. 1. Luz 2. Temperatura 3. Humedad 4. Ventilación 5. Riego 6. Abonado 7. Trasplante y fijación en árboles 8. Poda 9. Plagas, enfermedades y trastornos 10. Multiplicación 1. Luz Sitúa las Orquídeas en un sitio muy luminoso de la casa. Una de las causas más comunes de fallos de floración es la falta de luz. Un buen sitio es cerca de una ventana orientada al Sur. Con visillos o cortinas claras puedes proteger de los rayos de sol primaverales y veraniegos.
A la mayoría de las Orquídeas les gustan el sol directo en otoño e invierno, pero no en primavera y verano, o sólo un poco por la mañana o por la tarde. Algunos géneros como Phalaenopsis, Paphiopedilum, Phragmipedium, etc. tienen menos necesidades de luz y sólo admiten los rayos del sol durante el invierno y el resto del año luz muy filtrada. 2. Temperatura Las Orquídeas son plantas originarias de climas muy diversos: cálidos, templados y fríos, aunque la mayoría proceden de regiones tropicales y subtropicales. También hay especies que soportan las bajas temperaturas, incluso las heladas (menos de 0ºC).
Muchas necesitan para florecer que se produzcan diferencias de temperatura entre el día y la noche (unos 10ºC de diferencia). Dentro de la casa se puede conseguir la alternancia de temperaturas abriendo las ventanas por la noche para refrescar. Si quieres tener Orquídeas en el jardín exterior, colgadas de árboles, éstas deben tolerar el frío que se dé en tu clima porque se pueden pudrir los capullos de flor antes de abrirse. 3. Humedad En general, las Orquídeas necesitan una humedad ambiental alta. El aire seco de las viviendas, acentuado por la calefacción, es muy peligroso.
Sobre grava mojada Para aumentar la humedad a su alrededor puedes hacer lo siguiente: Poner las macetas sobre una bandeja con gravas o guijarros mojados pero sin que el tiesto esté en contacto con agua. Colocar recipientes con agua cerca de las plantas. Situar las plantas juntas para que se cree un microclima húmedo. Pulverizar con agua blanda, por ejemplo, de lluvia o descalcificada, pero no a las flores porque durarían menos. 4. Ventilación A las Orquídeas no les gustan los ambientes cargados, necesitan estar en sitios ventilados porque... * La planta se puede refrescar al bajar su temperatura. * Se renueva el oxígeno y el dióxido de carbono del lugar. * Se previene el ataque de hongos y bacterias al disminuir la humedad. Por tanto, es conveniente airear diariamente el emplazamiento, eso sí, evitando las corrientes de aire frío que provocan la caída de los capullos. Un pequeño ventilador puede servir en un momento dado para hacer circular el aire. Otra opción es sacarlas fuera los días de más sol en otoño e invierno y de paso aprovechar para que se rieguen con las lluvias. El problema es que ventilar y mantener una humedad elevada a veces es difícil. Si vives en un clima costero o atlántico-húmedo, es más fácil que en zonas de aire seco. 6. Riego a) Oncidium, Cattleya, Epidendrum... se riegan abundantemente y luego se dejan secar casi completamente antes de volver a regar
ONCIDIUM
CATLLEYA
EPIDENDRUM b) Cymbidium, Vanda, Dendrobium... se riegan prácticamente a diario, pero sólo durante la época de crecimiento. En la estación fría (otoño-invierno) en que las Orquídeas casi detienen su desarrollo, se las debe regar espaciadamente. En caso de tenerlas en interiores ó invernaderos, todo dependerá de la temperatura a que estén sometidas.
CYMBIDIUM
VANDA
DENDROBIUM c) Phalaenopsis, Paphiopedilum, etc. se les mantiene el sustrato constantemente húmedo. No cuentan con pseudobulbos (almacenes de agua) y necesitan de humedad casi permanente. Sustrata húmedo, pero no empapado, que es diferente.
PHALAENOPSYS
PAPHIOPEDILUM • La frecuencia de riego depende, además de la especie, de muchos otros factores como el tipo de sustrato, la temperatura, la luz, la ventilación, etc. Por ejemplo, a más luz y temperatura, más riego; las macetas de barro pierden agua por sus paredes pero las macetas de plástico, no. La experiencia en el riego es clave. • Riega por la mañana para que tenga humedad durante el resto del día. • Las Orquídeas toleran más la falta de agua que el exceso. Es decir, ante la duda no riegues. • Comprueba el drenaje. El agua estancada es mortal, se pudren las raíces. La calidad del agua • No uses para regar ni aguas salinas ni aguas calcáreas. • Sales: el agua puede llevar sales disueltas en exceso. Un síntoma son las eflorescencias blancas que quedan en los bordes de la maceta o por el agujero de drenaje. A veces, las aguas de pozos tienen este problema. No se puede corregir y por tanto, no uses aguas salinas para regar Orquídeas. • Cal: la cal del agua tampoco les gusta. Si no puedes aportar agua de lluvia, añade una cucharada de vinagre por cada 5 litros de agua y luego riega las plantas con esta mezcla. O mejor, usa el ácido cítrico como se explica aquí. • Cloro: el cloro que se utilizan para purificar el agua de consumo NO perjudica a las Orquídeas. • Es interesante almacenar agua de lluvia. Se puede guardar en tambores de plástico tapados. Si no le entra la luz no proliferan las algas ni las bacterias y el agua es útil por tiempo casi indefinido. No es necesario agregarle nada, ni cloro, ni alguicidas. • El agua de lluvia puede ser mezclada con una parte de agua "normal" para que dé más de sí. 6. Abonado o fertilización Venden fertilizantes especialmente formulados para Orquídeas. Son buenos. También sirven los usados para Plantas de Interior pero a la mitad de la dosis que indican en el envase. Las Orquídeas necesitan poco alimento (viven agarradas a los árboles). El exceso de fertilizantes quema e incluso mata. n plan de abonado práctico y general consistiría en aportar una vez al mes entre Febrero y Julio (en el Hemisferio Sur, entre Agosto y Enero). El resto del año nada o, si deseas afinar más, en otoño aporta cada 15 días un fertilizante que estimule la floración, es decir, que lleve una alta proporción de Potasio respecto al Nitrógeno y al Fósforo. La dosis a aplicar cada vez la indica en el envase, pero si el fertilizante viene en forma de sal, sería 1 cucharada por cada 5 litros de agua. 7. Trasplante • El drenaje en las macetas con Orquídeas debe ser perfecto. Para conseguirlo es necesario un sustrato muy aireado, suelto y con un agujero de drenaje en el fondo libre. Piensa que la mayoría viven adheridas a la corteza de los árboles (epífitas) con las raíces al aire y adaptadas a secarse rápidamente. • En general, el sustrato a los 2 ó 3 años pierde sus cualidades, se compacta reteniendo demasiada agua y acumulando sales de los fertilizantes. Si el riego y la fertilización han sido altos, se deteriora en sólo 1 año. Por tanto, hay que renovarlo haciendo un trasplante cada 1 ó 2 años.
CORTEZAS TRITURADAS
MUSGO • Los materiales que se utilizan para sustratos son diversos. Una mezcla general y buena es la formada por cortezas trituradas con musgo en una proporción del 70% y 30% respectivamente. Para más comodidad, en el mercado se encuentran sustratos preparados para orquídeas. • Usa la misma maceta que tenía, se trata únicamente de cambiar el sustrato. En una maceta grande no florecerá hasta que pasen 3 ó 4 años. Recuerda que las orquídeas son felices en tiestos pequeños. Elige un tiesto mayor si la planta ha crecido mucho.
• Los tiestos para Orquídeas epífitas suelen ser de plástico transparente para facilitar que la luz llegue a todas las raíces, como ocurre cuando está enganchada en un árbol de la selva. • El mejor momento para trasplantar es a finales de invierno o como máximo a principios de primavera, que es cuando las Orquídeas comienzan su período de mayor actividad.
• Si las raíces están en mal estado, desmenuza el cepellón de sustrato, corta las raíces estropeadas o podridas y traslada a una maceta igual ó más pequeña, rellenando con sustrato nuevo. • Puedes aprovechar el trasplante para dividir la planta y obtener varios ejemplares. Desmorona el cepellón, divide con las manos y planta cada división en una maceta distinta de tamaño apropiado y con sustrato fresco. Troncos de los árboles
ORQUIDEA EPIFITA >> En lugar de macetas, las Orquídeas epífitas pueden colocarse amarradas a un tronco o corteza que no tenga resina. >> La mejor época para "plantarlas" así, son los meses lluviosos o durante la temporada en la que la planta está en flor. >> La rama o tronco donde irá la planta no debe recibir sol directo durante todo el día. >> Retira la orquídea del recipiente para limpiar sus raíces. En el caso de que queden restos de sustrato no pasará nada. >> Las raíces que tocan el árbol se pegarán a él. Aún así es necesario atar la orquídea al árbol, preferiblemente con algún material de fibra vegetal, como la rafia o el algodón. En poco más de un mes, la orquídea quedará prendida. >> El riego tendrá que ser diario en época de crecimiento, ya que al estar las raíces al descubierto se pueden deshidratar con mucha facilidad. Por eso, lo ideal es que el clima sea uno muy similar al de su origen, lluvioso y cálido. >> Puede que las orquídeas no den flor el primer año, pero las darán posteriormente. 8. Poda • Corta las puntas negras que aparecen cuando la planta envejece. • Retira las hojas y flores marchitas. • Al finalizar la época de floración, corta por la base las varas de las flores. Si no la cortas, se fuerza la planta a que produzca otra de nuevo, lo que se traducirá en unas flores más pequeñas y el agotamiento de la planta.
• Con el fin de evitar propagar enfermedades (hongos, bacterias y virus) es imprescindible que las herramientas de corte estén perfectamente desinfectadas. Para limpiarlas puedes hacerlo con agua y jabón. Para desinfectarlas lo más corriente es la lejía diluida en agua (1 parte de lejía por 9 de agua). Las herramientas se sumergen en esta solución 1 ó 2 minutos. Como la lejía oxida el metal, lava después con agua y jabón y seca. 9. Plagas, enfermedades y trastornos Prevenir • Compra preferentemente en un establecimiento de garantías y donde te puedan asesorar sobre sus cuidados. • Lo mejor es comprarlas en sitios donde no las tengan tan "mimadas". Es decir, si están en invernaderos climatizados y forzadas en cuanto a fertilización, humedad, etc., resultan plantas menos rústicas para el hogar o el jardín. Son preferibles las plantas que han pasado un poco de frío o calor, exceso de luz o de oscuridad, que hayan recibido pocos fertilizantes... • Deben estar fuertes y vigorosas, sin manchas ni hojas amarillentas. • Las raíces si son negras u oscuras indican podredumbre. • Es recomendable mantener un tiempo aisladas las plantas recién adquiridas por si traen plagas o enfermedades que puedan extender a las demás. • Inspecciona las plantas con frecuencia. Cuanto antes detectes el problema, será mucho más fácil su control. • Pasa una esponja por las hojas de vez en cuando para quitarle el polvo y que puedan respirar. • La mejor medida preventiva general es tener las plantas bien cultivadas en cuanto a iluminación, humedad, ventilación, riego, fertilización, trasplante, etc. Así es muy difícil que se enferme. Plagas Plagas comunes son Pulgones, Araña roja, Cochinillas, Trips, etc.
Moja bien con los insecticidas para llegar a todos los recovecos de la planta. Seguramente será necesario repetir el tratamiento a los 15 días. Enfermedades Pulgones • Hay hongos que atacan manifestándose en puntos o manchas oscuras en hojas y flores y otros pudren las raíces y el cuello de la planta. Éstos últimos son los más peligrosos. Infectan cuando hay un exceso de riego o un mal drenaje. Para prevenir hongos se pueden pulverizar las Orquídeas con fungicida en otoño y primavera.
HONGO BOTRITIS EN FLOR • Las bacterias son patógenos que producen lesiones acuosas o manchas redondeados en pseudobulbos u hojas. Necesitan mucha humedad para infectar. Son muy peligrosas debido a que se desarrollan rápidamente y contagian a las demás plantas. Aísla inmediatamente la planta de las demás, corta el tejido infectado y no riegues durante varios días. No hay cura con productos químicos.
BACTERIOSIS • Virus: los dos más comunes son el Virus del Mosaico del Cymbidium y el Virus del Mosaico del Tabaco. Producen clorosis, malformaciones en flores y hojas marcadas. Los pulgones son sus principales propagadores de una planta a otra. Contrólalos y desinfecta las herramientas de corte. Las plantas con virus no tienen cura por lo que se deben destruirse (quemar).
Trastornos Aparte de plagas y enfermedades, la tercera causa de problemas en las plantas son los llamados trastornos o fisiopatías. Estos son los más típicos: • Luz insuficiente: provoca falta de floración, poco crecimiento, tallos que se caen, hojas de un verde muy oscuro... • Quemaduras por el sol: hojas amarillas o secas. (Foto inferior)
• Sequedad ambiental: la falta de humedad se manifiesta por el arrugamiento de hojas por un exceso de transpiración. Para aumentar la humedad del aire practica alguno de estos métodos ya comentados en el apartado de "Humedad". • Temperaturas bajas, corrientes de aire o gas etileno que desprenden las frutas cercanas a la planta pueden causar la caída de las flores. • Exceso de riego: se pudren las raíces. Saca la planta del tiesto, corta las raíces podridas (negras y blandas), lava y desinfecta el tiesto y cambiar el sustrato por otro nuevo. • Mal drenaje ó sustrato compactado por estar viejo: el resultado es el mismo que antes, se pudren las raíces. Asegúrate que el agujero de drenaje inferior no está obstruido y cambia el sustrato cada 1 ó 2 años haciendo un trasplante. • Exceso de fertilizantes: puntas secas. • Ocasionalmente la planta pierde sus hojas y es algo normal. 10. Multiplicación División
Se puede aprovechar el trasplante para dividir la planta y obtener varios ejemplares. Se desmorona el cepellón de tierra, se divide con las manos y se planta cada división en una maceta distinta de tamaño apropiado y con sustrato fresco. Semillas Por semillas es como se hace comercialmente y tiene su complejidad. Deben cultivarse en laboratorio y con unas técnicas complejas. La Orquídea produce un gran número de semillas, miles por cada fruto, incluso hasta 2 millones de semillas, son como granitos de polvo. Sin embargo, sólo unas cuantas logran germinar debido a que casi no tienen sustancias de reserva y requieren ser colonizadas por un hongo que vive en el suelo que le proporciona los nutrientes necesarios para germinar y desarrollarse en un principio. El desarrollo es lento, dependiendo del tipo de orquídea, puede tardar en florecer hasta siete años. Lo más producido comercialmente son los híbridos de Orquídeas. En invernaderos es posible generar híbridos cruzando especies de un mismo género o especies de distintos géneros pero la misma subtribu. FUENTE: INFOJARDIN

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